En conferencia de prensa en la 17ª Zona Militar y en presencia del presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador, Francisco Domínguez Servién declaró que los señalamientos del ex director de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya, son infamias.
El mandatario estatal hizo constar que su secretario privado fue removido del puesto debido al video filtrado, agregó que además dio parte a las instancias correspondientes para que él apele lo que a su derecho convenga.
Los gobernantes tenemos la obligación de enfrentar los hechos. Más cuando se trata de calumnias. De infamias. De ataques centrados en cuestiones políticas.
El titular del Ejecutivo Estatal, mencionó que los dichos de Lozoya son infamias por varias razones, entre ellas que él apoyó y presentó la reforma energética del 2008 en nombre del PAN, por lo que “No había necesidad de darme dinero para obtener un voto que ya se tenía por convicción.”
Si fuera cierta la calumnia, no habría presentado 807 reservas y modificaciones a la reforma del gobierno. No le hubiera quitado el control del Consejo de Administración de PEMEX, ni quitado 5 asientos al sindicato petrolero. Les recuerdo que el consejo aprueba contratos, obras, proveedores. Sacar al sindicato no solo incomodó al gobierno, sino que detonó amenazas contra mi vida. Si fuera cierta la calumnia, no habría propuesto la creación de un fondo petrolero, con recursos etiquetados, para asegurar la transparencia y evitar el saqueo que después se dio.