Dedicada a enemigos, rivales y adversarios
La guerra vuelve estúpido al vencedor y rencoroso al vencido.
Friedrich Nietzsche
Los tiempos electorales suelen ser violentos en México, en algunos lugares más que en otros, en Querétaro cada tres años el ambiente se ha venido polarizando aún más, el 2015 fue particularmente agresivo tanto en calle, medios de comunicación como medios digitales.
Una vez terminadas las elecciones solía haber una “Operación Cicatriz” entre rivales, vencedores y vencidos, equipos de campaña e incluso entre administración entrante y saliente, se tendían puentes que habían sido dañados al calor de la batalla electoral, en Querétaro, concretamente en el Municipio de Querétaro esta nueva administración, la de Marcos Aguilar no realizó operación cicatriz, ni al interior ni al exterior de la administración, las batallas se siguieron librando incluso después de que Aguilar y su gente tomaran el control del Municipio de Querétaro, la salida de varios conductores de noticieros y directores de medios generó un ambiente de aún mayor tensión, pues el aire se cargo de “sosopechosismo” ¿Habrán pedido desde Centro Cívico mi cabeza? ¿Fue así? No lo se, en lo personal me gustaría pensar que se trata simplemente de la vívida y paranóica imaginación de unos cuantos, aunque los hechos se pueden interpretar de muchas maneras, estas confrontaciones han llevado a que incluso medios se lancen contra medios y comunicadores contra comunicadores, algo que era muy poco usual y no había llegado a esta magnitud de confrontación y desgaste, los perdedores: los mismos medios y los comunicadores, cómodos e incómodos, las confrontaciones solo han generado fracturas en un gremio que solía hasta hace unos años estar muy únido, que se comunicaba con plena libertad y sobre todo que no permitía que hubiera ataques entre medios o comunicadores.
A todo esta equación hay que sumarle el mundo dígital, en campañas la proliferación de “troles” y cuentas nocivas es “normal” se crean diariamente decenas de cuentas destinadas a lastimar, ofender, desestabilizar y agredir al contrincante, los troles incomodan a los candidatos y sus equipos, los hacen estar a la defensiva y eventualmente cometer errores de comunicación, pasadas las campañas, tienden a desaparacer y/o caer en el desuso, en este proceso electoral, los troles jugaron un papel importante, cumplieron a cabalidad con sus objetivos, sin embargo no desaparecieron, incluso se hicieron mas ponzoñosos, descarados y agresivos.
Sería muy irresponsable culpar de todo lo que sucede al equipo que hoy, y por unos cuantos meses más, ocupa el Centro Cívico; la sociedad se ha polarizado, las críticas se han salido en muchas ocasiones de lo constructivo y lo cortés, muchos hemos iniciado escaramuzas tuiteras con el trol que creemos que es es alguien en particular, o con los empleados del alcalde, hemos caído en la trampa, hemos agredido como si ese fuera nuestro derecho, hemos ofendido como no nos gusta que se nos ofenda.
Reconozco que las críticas si no son constructivas y no tienen como fin aportar a que vivamos en una mejor ciudad, estado y país, sirven de poco, reconzco también que he caído en la agresión, rápidamente he contestado a un “chayotero” con un “gatuitero” o peor, eso no está bien, jamás entablaría una amistad con cierto nivel de personas, eso no significa que debamos ser enemigos, mucho menos que se agreda y ofenda con tanta facilidad, olvidamos que esto es una rueda de la fortuna, como se está arriba y luego se está abajo, a quien te topas de subida, puedes volver a ver de bajada ¿Qué clase de ambiente estamos generando para nuestros hijos? ¿Tensión, confrontación, rencores guardados que sólo pudren mentes y corazones? Eso definitivamente no es lo que quiero para mi Emilia y mi Inés, quiero que crezcan en un lugar mejor, donde se respete a cada quien por la forma en la que piensa y actua.
Es por eso que ofrezco una muy sincera disculpa a las personas a las que pensando que me asistía la razón, agredí u ofendí, no es mi intención que cada día generemos nuevas enemistades, por el contrario me gustaría que cada día cada quien desde su trinchera haga lo mejor por nuestro hogar, y a quien esté en el poder y no lo haga o abuse de su conidición que sean las leyes y la sociedad quien lo o la juzgue.
Si la operación cicatriz no viene de enfrente, que venga desde adentro, que cada quien sane sus heridas, valore lo mucho que seguramente tiene y entienda que la confrontación no deja mas que dolor y rencor a su paso.
“Ojo por ojo, nos deja a todos tuertos”
De mi parte esperen siempre un esfuerzo por crear una mejor realidad y un mejor futuro, no puedo ni quiero prometer que no criticaré o apuntaré a áreas de oportunidad pero sí puedo prometer hacerlo de manera constructiva y resptuosa.
Nos leemos muy pronto.
Éxito y bendiciones.
Carlos Vinicio Arredondo
@CarlosVinicioAR